por Valerie Summer Herrera, Coordinadora de Genero y Raza
El pasado Lunes 27 de Febrero, informamos sobre la trágica muerte de Shaina Vanessa Pretel, ocurrida en la madrugada del domingo, 26 de febrero, 2023. Shaina era una mujer trans afrodescendiente, lideresa social y madre comunitaria, quien formaba parte del grupo de mujeres de Afroresistencia en Cali - Colombia, abogando por los derechos de las mujeres trans y luchando por protección y seguridad económica para mujeres negras previamente encarceladas. Este suceso nos dejó a todas sumamente aturdidas, pues unas horas antes del homicidio, Shaina Vanessa se encontraba participando activamente en la reunión mensual del grupo de mujeres Afroresistentes en Cali, dejando un gran vacío en su comunidad y en nuestros procesos sociales.
En AfroResistencia consideramos importante denunciar que las muertes de mujeres trans, en la mayoría de los casos, pasan desapercibidas al no contar éstas con redes de apoyo significativas en las que sus vidas cobren valor y dignidad humana, es por esto que ellas se ven inmersas en múltiples escenarios en los que sus vidas e integridad física no son relevantes, lo que incrementa los ciclos de violencia, revictimización y sus realidades recrudecen a causa del abandono institucional. Es decir que, mientras más sola se encuentre una mujer trans más violaciones a sus derechos humanos encontrará. Shaina fue un ejemplo de ello; fue una mujer que se enfrentó a la injusticia en las cárceles, luego en las calles donde fue vulnerada al punto de que su cuerpo podía dar cuenta de las vulneraciones que vivió a partir de las profundas cicatrices que había obtenido a lo largo de su vida, cicatrices que nunca sanarán porque su vida nos fue arrebatada así como la de muchas mujeres trans negras que mueren en el olvido por ser consideradas sujetas peligrosas y desechables por la sociedad en general.
Es por lo anterior que, sabemos que en casos de tragedias o de abusos donde los afectados son individuos o comunidades pobres, vulnerables y sujetas segregadas y/o borradas del imaginario social, la rapidez con que se actúe es clave para lograr cierto nivel de justicia y celeridad en el proceso de investigación, por lo menos para identificar perpetradores, ya que el olvido y desinterés forman parte de las tácticas de erradicación y de deshumanización usadas por los gobiernos y las elites en contra de dichas personas y grupos. Tan pronto nos enteramos del trágico suceso, en Afroresistencia desplegamos todas las tacticas de comunicación posibles para que la información sobre el asesinato de Shania se hiciera pública y visible. Esto arrojo resultados satisfactorios ya que las autoridades Colombianas anunciaron que se había capturado al presunto asesino de Shaina y la investigación judicial indicó que el motivo del homicidio al parecer había sido el resultado de un acto de intolerancia, transfobia y discriminación contra la identidad de género de Shaina.
Sabemos que esto no le devolvera la vida a Shaina, pero esperamos que las acciones de incidencia que hemos extendido de manera internacional toquen los corazones de la sociedad en general y que aporten a la transformación de las condiciones estructurales que ponen a las mujeres trans negras en condiciones de altísima desigualdad, esperamos seguir trabajando activamente en la dignificación de los cuerpos y vidas de las mujeres trans negras, pero para esto necesitamos unir esfuerzos a futuro con distintas organizaciones, liderazgos y organismos internacionales que crean en la importancia de trabajar en red por las vidas de mujeres trans negras, para que estas no mueran en el olvido y el ostracismo al que han sido sometidas históricamente.
¡Es tarea de todas y todos trabajar para que sus vidas no sean erradicadas por completo del tejido social y que cobren valor y dignidad humana!
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